Redacción Médica: Flexibilidad, diálogo, emociones, empatía… son términos que empiezan a copar la conversación de la gestión sanitaria. Los directivos de la salud han comenzado a abrazar 'el cambio' y a plantearse la necesidad de poner a las personas, con todo lo que ello implica, en el centro de los sistemas de salud para poder humanizar estos.

Así lo han defendido Blas Trujillo, consejero de Sanidad de Islas Canarias; Jesús Fernández, consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha; y Catalina García, consejera de Salud y Consumo de Andalucía, durante la mesa que ha puesto el broche final este viernes al 23 Congreso Nacional de Hospitales y Gestión Sanitaria, una cita que, durante tres días, ha reunido a mas de 3.000 profesionales de la gestión sanitaria en Las Palmas de Gran Canaria.

"El cambio de modelo llega con trabajar por la prevención como objetivo principal", ha defendido Jesús Fernández. Los tres consejeros reforzado el mensaje que ha vertebrado las tres jornadas del congreso: "Gestionando con las personas". Fernández ha recordado que es momento de que en las políticas sanitarias "se plasmen las emociones" y para ello se deben tener en cuenta las necesidades de los pacientes, más allá de su curación.

Trabajar por la protección de la salud

Por su parte, Blas Trujillo ha puesto de manifiesto que el fin de un gestor sanitario es "trabajar por la protección de la salud" y que los pacientes "se convierten en clientes", por lo que los gestores deben ser "exquisitos en la búsqueda de la excelencia". Además, ha incidido en la idea de que "para cambiar el modelo de gestión para centrarlo en las personas", de debe tener en cuenta su opinión. "Necesitamos que los profesionales participen más en la toma de las decisiones en gestión, e implicar a los pacientes para que decidan sobre los temas que les influyen directamente", ha recordado.
 

Asimismo, ha señalado que en la actualidad hay "un sistema vertical" en el que el paciente acude al médico, explica que le ocurre, y este tiene un "tratamiento pasivo". "Es muy importante cambiar el modelo y dar al paciente más capacidad de actuar", ha aseverado.

Además, ha recordado que la protección de la salud "debe ser recurrente" y para ello es importante la promoción de hábitos saludables y "empoderar" a las personas para que puedan aplicarlos de manera autónoma.
 

Momento de la mesa de consejeros durante la tercera jornada del 23 Congreso Nacional de Hospitales y Gestión Hospitalaria.

Por la línea de la prevención ha seguido Catalina García, que ha explicado que uno de los objetivos que siguen desde el Sistema Andaluz de Salud (SAS) es poder contar con un sistema "generador de salud" eficiente y que de respuesta a las necesidades actuales de los ciudadanos.

"Tenemos que hablar de problemas y soluciones pero, sobre todo, de soluciones. Y para ello las palabras clave deben ser promoción, prevención y salud pública. Con ello llegaremos a un sistema capaz de dar la respuesta que necesitamos", ha asegurado.

Modelos de gestión más flexibles

Para alcanzar ese sistema tan comentando con el paciente como protagonista, los tres consejeros han coincidido que, desde las administraciones, se necesita promover políticas y modelos de organización y gestión más flexibles. "Necesitamos transversalidad, aprovechar las estructuras que tenemos y planificar acorde a ello", ha apuntado Jesús Fernández.

Por su parte, Blas Trujillo ha recordado que todos actores sanitarios "deben tener una interconexión y formar organizaciones más flexibles adaptadas a los nuevos tiempos". "Todos somos resistentes al cambio, pero creo que ya nos hemos dado cuenta de que necesitamos otros modelos", ha resumido.

Por último, la consejera andaluza ha apelado a un "gran pacto de la sanidad" para que todas las comunidades autónomas "puedan hablar tranquilas de lo que necesita el Sistema Nacional de Salud (SNS)".