Los médicos de Toledo y el Servicio de Salud de Castilla La Mancha

Los médicos toledanos reclaman al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) tiempo suficiente para poder atender a los pacientes y libertad y facilidad para prescribir el tratamiento más adecuado, porque sino, han alertado, no podrán atenderles con criterios de "calidad y eficacia". 


Así lo ha puesto de manifiesto el presidente del Colegio de Médicos, Luis Rodríguez Padial, y el responsable provincial de CSI.F, Jorge Curiel, durante la rueda de prensa que han ofrecido y a la que finalmente no ha asistido el representante del Sindicato Médico, asistencia prevista inicialmente.

Tanto el responsable de la institución colegial como el responsable provincial de CSI.F han apelado, a la hora de realizar estas peticiones, al Código de Ética y Deontología Médica, que, según han defendido, ha de inspirar y guiar la conducta profesional del médico y su relación con los pacientes.

Y es que, según han denunciado, "cada día es mayor la presión asistencial que padecen en las consultas, mayor la precariedad en la que desarrollan su trabajo diario y mayor la complejidad para prescribir el medicamento que consideran más eficaz, conforme a la evidencia científica".

Han alertado de que la falta de sustituciones de médicos de Atención Primaria, cuando estos salen de guardia, enferman o disfrutan de permiso reglamentario, provoca la "sobrecarga" de unas agendas ya completas del resto de sus compañeros y la disminución del tiempo que pueden dedicar a cada paciente, "alejándolos aún más de lo recomendando por las sociedades científicas e incrementando las listas de espera".

Temporeros

Sobre este asunto concreto, el responsable de CSI.F ha alertado de que las medidas de los gobiernos central y regional están poniendo en peligro la asistencia sanitaria, porque muchos profesionales, sobre todo los de las zonas rurales, "están sacando el trabajo como si fueran temporeros recogiendo fresas".

En este sentido ha dicho que algunos profesionales están "viendo, que no atendiendo" a cerca de 160 pacientes al día, lo que origina tensiones, tanto entre los propios médicos "que van a la consulta a la defensiva porque no saben lo que les espera cada día", como en los enfermos, que tienen que esperar más tiempo para ser atendidos, a veces por un médico distinto al que les atiende habitualmente.

Tras denunciar la falta de comunicación que el Gobierno regional está teniendo con los sindicatos, "a los que ha anulado usando la demagogia", el dirigente de CSI.F ha avisado de que esta situación se va a agravar en verano, porque el SESCAM no está planificando el aumento de la jornada laboral ni la sustitución de bajas. Por ello, les ha avisado de que "dar el alta los pacientes y cerrar las plantas de hospitales no es la solución a esta situación de caos".

Libertad de prescripción

Otra de las demandas formuladas tanto por el Colegio de Médicos como por el sindicato CSI.F hace referencia a la libertad de prescripción del facultativo, "que ha quedado mermada al haberse restringido en el sistema".

Así, aseguran que en la actualidad estos medicamentos son sustituidos de manera casi automática por otros fármacos del mismo grupo terapéutico, pero distinto principio activo, "que el SESCAM considera equivalentes, pese a que con frecuencia hay suficiente evidencia científica para mantener la prescripción original, especialmente cuando se valoran las circunstancia concretas del paciente".

Por todo ello, tanto desde el Colegio de Médicos como desde el CSI.F han pedido al Servicio de Salud regional que reconsidere "su política de imponer medidas para reducir el gasto sin contar con los profesionales que tienen que aplicarlos", convencidos de que, desde su ética profesional, los médicos pueden y deben colaborar con las autoridades sanitarias para procurar el mantenimiento del sistema en momentos de crisis, sin pérdida de calidad en aspectos esenciales.

Nuevos recortes

De otro lado, el presidente del Colegio de Médicos de Toledo se ha pronunciado, a preguntas de los medios, sobre la intención del Ejecutivo central de recortar 10.000 millones de euros del presupuesto destinado a Sanidad.

Sobre este asunto concreto, Rodríguez Padial, que ha dicho ser consciente de la necesidad de adaptarse a la situación económica actual, ha pedido a los responsables de las administraciones que escuchen a los profesionales a la hora de acometer nuevas medidas de recorte, "porque no es lo mismo podar que talar".

Confiado en que los gestores sean "más inteligentes" a la ahora de ahorrar, ha defendido que se pueden reducir costes, por ejemplo, con una mejor organización y coordinación entre la Atención Primaria y la Especializada, sin que esto afecte a la calidad del servicio.

También a preguntas de los medios, Rodríguez Padial no se ha mostrado ni a favor ni en contra del copago sanitario, sino de controlar la demanda sanitaria, que es "ilimitada", de la manera "menos lesiva", aunque sí ha recordado que la sanidad no es gratuita, pues los ciudadanos ya la sustentan de forma progresiva.

Así las cosas, ha asegurado no ver mal la gestión pública-privada que se va a imponer en algunos hospitales de Castilla-La Mancha, si funciona bien y a un coste razonable, aunque ha confesado que "le duele" que la administración tenga que acudir a este fórmula al no poder ofrecer este servicio como lo ha venido haciendo.